Objetivos e Intenciones 2021
- Nutri Nati Vitantonio

- 10 ene 2021
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 11 ene 2021
Llegó un nuevo año!
Seguro terminaste o arrancaste el año pensando en el “balance”. Qué nos dejó el año, qué aprendimos, qué pudimos hacer y que no.
Durante el 2020 pasamos por muchísimas etapas. Algunos de nosotr@s tuvimos un tiempo para la introspección, otros sentimos que éramos poco productivos y que no estábamos aprovechando el tiempo lo suficiente; algunos días nos mortificamos pensando que deberíamos poder hacer más ejercicio en casa; quizás aprovechamos otros para organizar mejor las comidas en nuestro hogar; tal vez también nos angustiamos, sentimos ansiedad, y/o se nos dió por comer un poco más o menos de lo habitual... Puede ser que, hasta incluso, como nos pasó a nosotras, pasaste por absolutamente tooooodos los estadíos.
Pero ¿sabes que?. Está bien! Es normal!, no todos podemos hacer de una pandemia mundial la mejor oportunidad de nuestras vidas, por más que algunas personas en las redes digan y nos quieran hacer creer lo contrario.
Al pensar en tu propio balance, vos, ¿te reprochas? o ¿podés agradecer lo que lograste?.

Tenemos la certeza de que seguro lograste algo, quizás fue un emprendimiento, quizás descubriste una actividad que te relaja o te reconectaste con ella, quizás lograste entenderte mejor o comenzaste a apreciar las pequeñas cosas que antes de todo esto dabas por sentado. Sin duda el 2020 fue un año de muchísimos aprendizajes, ¡valorá y atesorá lo sí pudiste hacer!.
Ahora, con enero 2021 comienza un nuevo año y en estos tiempos suelen llegar a nuestra mente nuevos objetivos en forma de pop-ups. ¡Que manía que tenemos los seres humanos de cerrar y abrir con el año calendario la agenda personal!. Como si al terminar el año se transformara el mundo por completo, o como si no pudiésemos recomenzar lo que sea en cualquier momento del año, porque después de todo, ¿qué cambia en realidad del 31/12 al 1/1 ?
Acordate de esto siempre: “Podés empezar lo que sea cuándo vos lo decidas y quieras e incluso podés intentarlo una y mil veces más” Creenos que si aún no lograste eso que te habías propuesto no quiere decir que fracasaste, o que podrías haber hecho más, sino que simplemente lo tenés que seguir intentando porque quizás aún no encontraste TU propia manera de hacerlo y desde acá te motivamos a que sigas insistiendo en construir tu bienestar.
Ahora, ¿Hacia dónde?
Si decidís arrancar ahora en Enero con nuevos objetivos … ¡enhora buena!. Pero te proponemos un pequeño twist a la hora de pensarlos y redactarlos.
Te invitamos a que en vez de plantearte objetivos, puedas plantar intenciones, porque ante todo… nuestra intención primera es construir nuestro bienestar, ¿o no?. Y ese bienestar se puede teñir es escala de grises, y a la vez es muy personal (te dejamos un post de Nati al respecto acá).
Te lo explicamos mejor con un ejemplo: si mi objetivo se planteó como ‘comer más sano’ y de repente en mi vida se presentan distintos eventos sociales, o simplemente tengo ganas de comer ‘algo no tan sano’, puedo sentir como que no estoy pudiendo cumplir ese objetivo y pensarlo como ‘fracaso’.

En cambio, si planto la intención de “comer en conexión conmigo” me permito ser más flexible sin sentirme culpable e incluso esa intención me abre a poder pensar en explorar más posibilidades, como puede ser el percibir mi nivel de hambre y saciedad al comer, el no juzgar mis ‘antojos’, el estar ´presente´ al momento de comer degustando los aromas, texturas y sabores de la comida elegida, como hasta incluso el empezar a observarme sin criticarme para mejorar mi vínculo y relación con las comidas.
Cuando planteás objetivos, conectás con tu mente racional, para crear un plan, ordenar actividades y tareas para lograr tus metas. Y eso no está mal! Pero tené presente que quizás en el trayecto puede cambiar tu entorno, tu ambiente, tu vida puede dar un giro de 180 grados, o incluso podés encontrarte con una bifurcación de caminos, y ahí está la importancia de saber flexibilizar, o reconocer que al cambiar las circunstancias pueden (o deben) cambiar los objetivos.
En cambio, cuando plantás tus intenciones, y vas actuando en base a ellas, con cada acción vas regando tu intención cual semilla, poco a poco cada día con lo que podés hacer ese día, y al hacerlo conectás con la verdadera magia y poder que llevás dentro, te alineás y actuás en sintonía con vos.
Al pensar en intenciones, nada está bien, ni nada está mal, porque existe un arcoíris de infinitas gamas de colores y de posibilidades para actuar en relación a tu realidad actual.

Pronto saldrá un video en nuestro canal de youtube para hablar sobre estos temas con más profundidad. Podés suscribirte haciendo click acá para que te avisemos cuando esté listo para verlo.
Mientras, te dejamos debajo una plantilla para que puedas descargar y completar en ella tus objetivos y transformarlos en intenciones para que comiences el año en sintonía con vos y más alineada a tu propósito. Te invitamos a ver este breve post en la cuenta de Nati sobre cómo transformar tus objetivos en intenciones para ayudarte un poco más.
Podés compartirnos por mail o en nuestras redes sociales tu plantillita con tus intenciones, o escribirnos cualquier duda que te surja al respecto, ¡nos encantará ayudarte!.
Gracias siempre por estar del otro lado! Esperamos con ansias saber de vos.













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